Como sabéis, unos días antes de las vacaciones de Navidad nos visita la Tronca. Viene desde el Pirineo y la pobre camina tanto para venir a vernos que se queda muy delgada y desnutrida. Por eso, entre todos los alumnos de infantil le vamos dando de comer y la engordamos un poco.
Es tan, tan glotona esta tronca que al final acaba gordísima. El día antes de vacaciones bajamos a verla y para ayudarla a "echar"esos excesos le damos golpecitos con un bastón de plástico y hacemos que "cague" y nos regale dulces.
La tronca es muy sabia y nos conoce muy bien por lo que siempre nos dice unas palabras antes de darnos nuestra bolsita de regalo. A veces la tronca se lo piensa un poquito pero como sabe que somos muy buenos y que cada día nos portamos mejor siempre nos da nuestra recompensa.
Os dejamos algunas fotos de ese día aunque no nos dimos cuenta y algunas han salido un poco borrosas.
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